Significado del Padre Nuestro
SIGNIFICADO DEL PADRE NUESTRO:
El padre nuestro es quizás la oración más conocida y orada por los creyentes cristianos. En el Santo evangelio(Mateo 6:9-13 y Lucas 11:2-4), podemos ver que Jesús usó esa oración como ejemplo para enseñar a sus discípulos cómo orar.
"Padre Nuestro que estás en el cielo, Santificado sea tu nombre":
La oración del Padre nuestro comienza reconociendo que hablamos con Dios, nuestro Padre. Somos parte de su gran familia Como somos sus hijos, podemos hablar directamente con él sin necesidad de intermediarios. Nuestro Padre amado nos escucha y podemos acercarnos a él con toda confianza en cualquier momento (Hebreos 4:16).
"Venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad así en la Tierra como en el cielo":
Luego, reconocemos a Dios como nuestro Rey. Donde Dios reina las cosas son mucho mejores de lo que podemos imaginar. Su reino es uno de justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo (Romanos 14:17). Dios sabe lo que nos conviene en cada momento y en medio de cualquier situación. Debemos aprender a someternos a su voluntad confiando plenamente en su bondad.
"Danos hoy nuestro pan de cada día":
Al orar el Padre nuestro reconocemos que Dios es quien suple nuestras necesidades diarias. A la misma vez aprendemos que está bien mencionar nuestras necesidades ante Dios en oración. Podemos pedir por el pan diario, que Dios supla nuestras necesidades básicas y específicas del día. Nuestras peticiones también deben incluir las necesidades de nuestros hermanos y de toda la humanidad. Nuestro deseo debe ser que todos tengamos alimento, sustento y techo.
"Perdona nuestras ofensas, como nosotros perdonamos a quien nos ofende":
Llega el momento de reconocer nuestros errores y pedir perdón a Dios. Solo él nos perdona completamente, restaura nuestros corazones y nos da la oportunidad de un nuevo comienzo. Es precisamente en este momento y con esta actitud que debemos examinar nuestros corazones para ver cuál ha sido nuestra disposición a perdonar aquellos que han cometido faltas contra nosotros.
"No nos dejes caer en tentación, y líbranos del mal":
Somos humanos y podemos ser débiles, pero Dios no nos deja solos en nuestra lucha frente a las tentaciones y el mal. Él está con nosotros y él es más poderoso que el maligno. En Dios, y en la armadura que él nos provee, tenemos la verdadera protección frente a las artimañas del enemigo (Efesios 6:10-13). Dios pelea por nosotros y en él tenemos la victoria final.
Comentarios
Publicar un comentario